La expansión de las Redes Sociales ha modificado la relación entre los consumidores y las empresas a nivel global. A través de estos canales en línea, y con unos cuantos clics, cualquier persona puede ponerse en contacto con los representantes de los negocios y hacer de conocimiento general si algún producto o servicio cumplió con sus expectativas.
En nuestro país, la situación no es distinta, y para muestra basta con revisar algunas cifras.
Un estudio realizado por la Asociación Mexicana de Internet (AMIPICI) señala que en el lapso 2010-2016, el volumen de internautas prácticamente se duplicó, al pasar de 34.9 a 70 millones, con una penetración de 63% entre los mexicanos mayores de 6 años.
Dentro de este universo, cada individuo pasa, en promedio, 8 horas al día conectado, siendo su principal actividad online el acceso a redes sociales (83%), sólo por detrás de enviar correos electrónicos (78%) y conversar mediante plataformas de mensajería instantánea o chats (77%). Lo anterior nos revela que la mayor inversión de tiempo en internet se destina a navegar y buscar información en las distintas Redes Sociales.
Del mismo modo, el Top 5 de redes sociales en México lo encabeza Facebook, con el 95% de cuentas activas entre los internautas, seguido por Whatsapp (93%), YouTube (72%), Twitter (66%) e Instagram (59%); en contraste, tan sólo el 1% no está dado de alta en ninguna clase de Redes Sociales.
Esto deja entrever la relevancia de que las empresas -sin importar su tamaño- cuenten con estrategias activas en Redes Sociales, particularmente en Facebook. Al ser la red predilecta de la audiencia mexicana se convierte en el medio ideal para posicionar una marca en el imaginario colectivo, fidelizar clientes asiduos y captar la atención de consumidores potenciales.
Lo anterior puede conseguirse con un plan de acción enfocado a objetivos específicos, como pueden ser la proyección de un producto, atracción de prospectos, atención al cliente, difusión de descuentos, entre otros. Cada una de estas metas no debe dejarse al azar, debe ir acompañada de una calendarización enfocada al cumplimiento de objetivos específicos y el análisis constante de resultados, a fin de optimizar las acciones a seguir en el futuro.
Además, es importante contar con un Community que gestione de la mejor manera el material publicado y la interacción con los usuarios. Proporcionar información de interés y dar una respuesta adecuada a cada seguidor son dos puntos fundamentales -por no decir los pilares- de una buena estrategia en Facebook (y en general, en cualquier red).
Todos estos elementos se complementan con el uso de la publicidad pagada en Facebook, mejor conocida como Facebook Ads, la cual permite dirigir determinadas publicaciones a audiencias segmentadas, con intereses afines y características demográficas que podrían estar más interesadas en adquirir determinados productos.
El sector automotriz tiene un gran potencial para publicitarse y ganar terreno Facebook. Si bien no constituye el medio principal para concretar una venta, sí puede ser el primer punto de contacto con la gente interesada en adquirir un automóvil, al mostrarles características y ventajas de modelos disponibles, promociones vigentes, invitaciones a eventos especiales e inclusive, contenido lúdico encaminado a generar conversación.
¡No dejes pasar más tiempo e integra tu concesionaria al mundo de las redes sociales!
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